El martes 14 de octubre, en la Feria del Libro, se realizó un conversatorio con autores LGBTIQ+. Lxs autorxs leyeron fragmentos de sus libros, compartieron sus procesos de escritura y un poco de su historia.

El conversatorio comenzó con Alejandro Calderón que este año escribió “El silencio del niño”. Es una obra autobiográfica que relata su historia de vida marcada por el abuso sexual infantil, el silencio y la resiliencia. Alejandro transforma su experiencia en un testimonio de sanación y amor propio.

Calderón es peluquero pero vio la escritura como una herramienta para sanar su dolor, liberarse y sanar. El autor cuenta que gracias al libro pudo ayudar a familias a contar su historia. 

Alejandro comenzó a escribir para él, para contar su historia y de alguna manera soltar eso que tenía guardado. Con el paso del tiempo, descubrió que quizás su historia podía ayudar a otros y así fue que se convirtió en un libro. 

La charla continuó con Lisette Coronado, que escribió “100 días sin instagram”. Un diario íntimo que reflexiona sobre el amor, la ansiedad, las ganas de morir y honrar la vida. Lisette nació en Corrientes, es artista y licenciada en psicología.  El libro es un autorretrato en forma de diario íntimo, que surge de la decisión de eliminar la aplicación en un momento de crisis personal, invitando a reflexionar sobre la vulnerabilidad humana y el uso responsable de las redes sociales. 

La autora comentó que pasó un momento de ansiedad muy grande en donde se sentía sola y a su vez estaba transitando un duelo. “Cada vez que quería abrir la aplicación me ponía a escribir y así fue como se formó este libro” comentó. 

Lisette compartió fragmentos de su libro en donde te adentraba a la cotidianidad de sus días, son relatos muy íntimos. Cada pensamiento, cada rutina y cada sentimiento que atravesó en esos 100 días, están plasmados en el libro. 

Al finalizar los espectadores le hicieron algunas preguntas, entre ellas, cómo se sentía actualmente tras esa experiencia. La psicóloga comentó que aprendió a saber cuando parar, a darse cuenta cuando está en automático y poner un freno.

A continuación tomaron la palabra Val Catoni y Lorenzo Romano integrantes de la Asociación Civil La Casita Trans. Participaron de la revista “Miradas, dialogos y reflexiones” que  sistematiza los debates y aportes del Primer Congreso Nacional sobre Niñeces Trans.

El Congreso está dirigido a estudiantes, profesionales, instituciones, organismos, organizaciones, clubes, centros vecinales, medios de comunicación, familias y referentes afectivos, y a quienes acompañan niñeces, adolescencias y juventudes trans en sus diferentes ámbitos de socialización y participación. Es un espacio para pensar estrategias para garantizar los derechos de las identidades trans desde sus primeros años.

La segunda edición del Congreso se llevará a cabo el 17 de noviembre de 2025 de 9 a 16 horas en el auditorio Perón de la Universidad Provincial de Córdoba.

Las inscripciones ya están abiertas para quienes quieran participar ya que son cupos limitados. Lo organiza la Asociación Civil La Casita Trans. 

Por último el micrófono lo toma Lucas Leal, el autor de “Creyentes y diverses”. Con 10 relatos, invita a recorrer testimonios, reflexiones y búsquedas de personas LGBTIQ+ que, lejos de renunciar a la vivencia de su fe o a la de su sexualidad, encontraron múltiples formas para unir ambas dimensiones de su vida.

Lucas Leal es docente, investigador y activista. Nació en Tucumán y creció en Villa Angelina, en un hogar atravesado por una religiosidad cotidiana y cercana. Desde chico participó en grupos parroquiales y, a los 18 años, se fue a Buenos Aires para ingresar al seminario de los mercedarios. Durante una década, su vida estuvo dedicada a la formación religiosa. Hasta que a sus 28 años se enamoró perdidamente y puso en tensión la religión y el amor.

En esta obra propone superar esa dicotomía entre ser LGBTIQ+ y creyente. En el libro, hay testimonios de personas gays, lesbianas y trans que relatan sus trayectorias espirituales, las exclusiones que sufrieron, pero también los abrazos que las sostuvieron.

Lucas contó que la primera vez que él decidió contarle a alguien sobre su sexualidad fue a un sacerdote y que el abrazo que recibió por parte de él fue liberador y sanador. 

Después de leer un fragmento de su libro, comentó de las veces que ocultó sus sentimientos por el miedo al qué dirán y que le hubiese gustado vivir una infancia y adolescencia libre. 

Todos estos autores encontraron en la escritura un modo de salvación, de refugio y de liberación. Este tipo de espacios son importantes porque, no sólo permitió conocer nuevas obras, sino también visibilizar la diversidad de experiencias que atraviesan a la comunidad LGBTIQ+.

En un contexto donde aún persisten prejuicios, estos espacios son una invitación a seguir construyendo una sociedad mas justa.

A su vez, cada relato abrió la posibilidad de repensar los modos de habitar el dolor, la identidad y la fe, demostrando que la palabra también puede sanar.