Entre multitudes y carteles, los rayos de sol refractan a pleno en el cemento del predio ferial La Rural donde entre el 1 y el 3 de noviembre se celebró la 5ta edición Expocannabis Argentina. Una de las expo más grande de América Latina en el abordaje de la planta de cannabis.
Apenas se abrió el predio de la rural, una leyenda que interpeló a todes les asistentes: cultivar el suelo es servir a la patria.
El lugar huele a cannabis, a chala. Los policías, los equipos de seguridad y paramédicos no miran a los asistentes, ni juzgan por tirar humo con olor a cannabis. Por portar olor.
A la entrada se la encuentra siguiendo la marea verde biológica. Al ingresar quedamos perplejos, el complejo lleno de stands de todo tipo. Luminarias, plantas, juegos, sahumerios, semillas, parafernalias. La expo contaba con tres días de charlas, conferencias y actividades específicas.
Lo que fue novedad este año fueron los observatorios de hongos y plantas, junto con el gran desarrollo de emprendimientos y propuestas locales que iban desde lo productivo, industrial, jurídico hasta a propuestas de comunicación y formación en salud y cannabis.
En el predio era fácil encontrar a personajes del mundo del cannabis: Javier Ruano de Medical Seeds España, Mila Jansen, la Reina del Hachis y Maula Mónica de Flowers and Terps.
Durante la transmisión radial de Maula, uno de los fundadores de los primeros clubes legales de cannabis medicinal en argentina, el pionero comentó: “Este año está explotado; en cuanto a la puesta en escena creo que se ven cada vez más marcas de afuera y nacionales que quieren participar y crecer. La industria supone un montón de situaciones legales y de papeles que hace meses largos que está frenado. Lo que no frena es el impulso de la cultura. La cultura pide a gritos que se libere la planta y que se hable de una industria nacional. Las flores no mienten”.
El público de la expo son niños, adolescentes y adultos que vienen a jugar en las ruletas y a los miles de juegos con los que reciben los emprendimientos y en stands del lugar. Para quienes estaban con el azúcar bajo o se había comido accidentalmente un comestible con cannabis, estaba el patio del predio con sillones, juegos y más emprendimientos para seguir disfrutando.
Segundo día de la expo, 15 horas. El recorrido inicia y secuela en las inmensidades y propuestas al aire libre. Lo más llamativo,luego de ver a tantos niñez jugando, es el despliegue de fuego de los proyectos de arte en fuego. Uno de los nuevos rubros top del cannabis, el consumo libre de humo en pipas y artefactos en vidrio soplado.
La programación que acontece este sábado venía más cargado de charlas y jornadas con mayor contenido científico, de ciencia y salud. Pero faltaba algo. Al ingresar a La Rural el cartel del que todos los de la industria estaban orgullosos el viernes, estaba tapado y siguió tapado hasta el final de la expo: Cultivar el suelo es servir a la patria.