Más de 200 estudiantes, entre los que se encontraban tanto militantes como autoconvocados votaron ayer sumarse al resto de facultades del país que estaban siendo tomadas. Facultades de Filosofía, Artes y Humanidades de universidades como Rosario, Buenos Aires y Córdoba habían sido tomadas por los estudiantes el 8 de octubre.

La asamblea fue convocada a raíz de la votación del día de hoy en la Cámara Baja del Congreso de la Nación, que validará o rechazará el veto a la Ley de presupuesto universitario. La asamblea comenzó a partir de las 17:30 y duró aproximadamente tres horas. Previo al inicio de este encuentro extraordinario del gremio estudiantil, el presidente del centro de estudiantes Juan Manuel Arrieta expresó que: “No hay que llegar a puntos drásticos hoy, entendiendo que el clima generalizado no amerita eso. Hay que esperar a ver como avanza esta semana compleja. Tomar decisiones apresuradas podría resultarnos contraproducente”.

Con una mirada negativa hacia la toma de la Facultad de Ciencias de la Comunicación, el centro de estudiantes se posicionó en conjunto con Franja Morada (FM). Julieta Varela, consejera estudiantil por FM comentó que: “Lo último que hay que hacer es llegar a una medida que consista en encerrarnos entre cuatro paredes”. También calificó la toma como una iniciativa drástica y afirmó que como agrupación, no la acompañarían.

Por su parte, agrupaciones como La Marea y Caleuche fomentaron y propusieron una toma de 24 horas de la Facultad de Ciencias de la Comunicación. Argumentaban que el presidente Javier Milei no escuchó a los estudiantes tras la segunda y masiva marcha de estudiantes del 2 de octubre. Además, criticaron propuestas como arancelar los estudios universitarios a extranjeros o el recorte a las becas Progresar. “Es un gobierno que no escucha y es por eso que hay que radicalizar las medidas”, comentó María Franca Condori Bazán, miembro del Honorable Consejo Directivo por la agrupación La Marea. “Más que tomar por tomar, la idea es poder usar esta acción como una visibilización de lucha para que nos escuchen”, añadió.

También en la asamblea marcaron su presencia los gremios docentes y no docentes. Mientras quienes desempeñan tareas no docentes insistían en esperar y no tomar la facultad con el argumento de que el Ministerio de Capital Humano habría aprobado un aumento de un 6 % para los salarios, el gremio docente, con algunas excepciones, apoyaba la medida de la toma. “El horizonte de medidas a tomar son tomas y paros”, comentó Juan Balussi, delegado del Gremio de los Docentes e Investigadores Universitarios de Córdoba (ADIUC). 

La votación se realizó a mano alzada con un total de 235 votos, entre los cuales hubo abstenciones de estudiantes que manifestaron que apoyarían ambas decisiones. El resultado fue de 107 votos a favor de la toma, y 128 en contra, provocando gritos y disturbios por parte de estudiantes que apoyaban la acción de protesta.

También se sometieron a votación medidas relacionadas con posicionamientos ideológicos, que fueron aprobadas, pese al marcado descontento de agrupaciones y estudiantes que se marcharon con cánticos que referían a la “Universidad de los trabajadores”. 

“La asamblea fue de las más masivas en mucho tiempo. Me parece que fue una muy buena asamblea. Puede ser que falte un poco más, un poco más de apoyo estudiantil. Sin embargo, lo que más valoro de la asamblea es que fue democrática, fue representativa, y si no se votó a favor de la toma, igualmente celebro la masividad”, comentó María Eugenia Gómez delegada de ADIUC en la FCC, una vez terminada la asamblea.