El día 23 de septiembre se le hace honor a las bibliotecas populares. Polvorientos estantes y libros gruesos con mil y un volúmenes se encuentran allí. También podemos encontrar respuestas a preguntas poco conocidas en escritos sobre ciencias, o quizás, descubramos mundos repletos de bestias mitológicas, capaces de darnos batallas inimaginables al leer algún tomo de género fantástico. Tal vez, hallar allí historias de vida únicas, llenas de superación personal y obstáculos por vencer, que al fin y al cabo, se aprovechen de lo que somos: seres empáticos.
Las bibliotecas populares son capaces de transportarnos a toda esta gamma de emociones y al mismo tiempo, nos permiten ser parte de una comunidad. Estas instituciones encuentran su origen en clubes de lectura ideados por Benjamín Franklin en el año 1727. Luego, Domingo Faustino Sarmiento utilizaría esta idea para crear la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), con lo que fomentaría su creación y desarrollo. La CONABIP tuvo sus idas y vueltas hasta que en el año 1986 se estableció una ley con los objetivos y el funcionamiento, al igual que el Fondo Especial para Bibliotecas Populares.
Según el ministerio de Cultura de la Nación, una biblioteca popular es “una asociación civil autónoma creada por la iniciativa de un grupo de vecinos de la comunidad” que se ocupa de ofrecer un espacio en el que se desarrollen actividades culturales de lectura.
En Argentina existen más de 3000 bibliotecas de estas características. En Córdoba se encuentran empadronadas más de 100.
Un ejemplo local de estos espacios es la Biblioteca Popular María Saleme, fundada en el año 2005 por un grupo de mujeres educadoras populares. Trae su nombre en honor a María Saleme de Burnichon, pedagoga argentina que dedicó su vida a la alfabetización de mujeres obreras.
El Aspirante pudo conversar con la actual presidenta de la Comisión Directiva de la biblioteca, Rocío Longo, Licenciada en Comunicación Social y encargada de comunicación de la Editorial de la Universidad Nacional de Córdoba.
La Biblioteca María Saleme, organiza diferentes actividades: conferencias, ciclos de poesía, charlas, cine debates y talleres culturales. Según Longo, las actividades que desarrollan se originan en propuestas de sus propios socios, estas se deciden en las asambleas de socios y las reuniones de comisión directiva ampliada.
Por otro lado, para poder ser una biblioteca hay que tener libros. La presidenta de la comisión directiva explicó: “Conseguimos los libros a través de donaciones que fuimos recolectando desde el 2005 hasta ahora” además “compramos libros con el subsidio que nos da la CONABIP, en el marco del programa libro por ciento que nos permite viajar a la Feria del Libro de Buenos Aires para comprarlos al 50% de su valor”. Para decidir qué libro comprar “le pedimos a nuestros socios que nos armen la lista de libros que les gustaría que tengamos” comentó la comunicadora.
La biblioteca se ubica en Artigas 60, pleno centro de la capital cordobesa. Está abierta de lunes a viernes de 15 a 18 horas. A continuación podes encontrar el link de su página que cuenta, además, con pódcast variados y artículos informativos: https://bibliotecamariasaleme.ar