El viernes 3 de noviembre se llevará a cabo una nueva edición de la Marcha por el Derecho a la Salud Mental, cumpliéndose diez años desde la primera movilización para exigir la plena implementación de las Leyes Nacional y Provincial de Salud Mental.
En ese marco, el pasado 26 de septiembre se realizó la primera reunión organizativa en el Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba. El objetivo fue analizar la situación actual con respecto a la implementación de la Ley de Salud Mental y definir la consigna de la manifestación.
Además, se debatieron las condiciones de internación de los usuarios de salud mental en las instituciones monovalentes que por Ley deberían estar clausuradas. El foco estuvo en la situación particular del Hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba, dónde los usuarios denunciaron la reducción de visitas, el cierre de talleres luego de la pandemia, la falta de personal para los 55 pacientes internados y la carencia de camas: “Es peor que la cárcel”, concluyó uno de ellos.
Los participantes fueron los usuarios de los servicios de salud mental, estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba, representantes del Observatorio de Salud Mental y Derechos Humanos, del centro de día Confluir, del centro de tratamiento de adicciones Programa del Sol, del INADI en Córdoba, de Radio Los Inestables, de la casa de asistencia y acompañamiento comunitario Casa Pueblo Yapeyú, del espacio comunitario para consumo problemático Casa Esquina Libertad, y profesionales particulares.
Martín Passini, miembro del Observatorio de Salud Mental y Derechos Humanos, declaró: “La marcha tiene que luchar por la efectiva implementación de la Ley, que este año cumple trece años. En Córdoba hace tres años se deberían haber cerrado todos los manicomios y se deberían haber abierto los dispositivos comunitarios que los sustituyan. Hace tres años estamos en total ilegalidad”.
Es en el contexto actual de elecciones presidenciales que la marcha de este año cobra un tinte de alarma, debido a que la fórmula que más resuena es la de La Libertad Avanza por su triunfo en la PASO (encabezada por Javier Milei y Victoria Villarruel), que propone recortes en el presupuesto de salud mental. Al respecto, Passini opina: “Tenemos que hacernos cargo del momento en el que estamos y la gravedad de la situación que se nos presenta a partir del 10 de diciembre. Sería un retroceso terrible que en vez de estar discutiendo el despliegue de servicios comunitarios o la desmanicomialización estemos tratando de frenar un retroceso a nivel de la última dictadura”.
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